Los oficialista Lucas Pica y Facundo López defendieron la iniciativa del Ejecutivo. Coincidieron en que la propuesta viene a saldar una deuda en materia electoral, cumpliendo con una manda constitucional, dando un saldo de calidad institucional, terminando con la transitoriedad, y valorando la seguridad jurídica que otorga la especificidad en la materia. Ambos resaltaron que la iniciativa no busca revanchismo ni represalias. Juan Martín, de Cambiemos, coincidió con estos argumentos.
Por la oposición, Nicolás Rochás criticó que el tema fue propuesto sin consultas ni la injerencia de los sectores involucrados y condicionó su aval al retiro del expediente. La moción fue descartada.
En la misma línea, Pablo Barreno aseguró que el proyecto está “lejos de los vecinos” y sostuvo que se trata de un “castigo ejemplificador para que nunca más ningún tribunal o el Superior Tribunal de Justicia ose votar en contra del Gobierno”.