La legisladora Susana Diéguez (FpV) presentó un proyecto de ley con el fin de prevenir afecciones psicofísicas que puedan desencadenarse con motivo del desarrollo de actividades recreativas, deportivas y gimnásticas, llevadas a cabo en encuentros deportivos, competencias y similares en los que intervengan masivamente participantes que practiquen deportes de manera recreativa y amateur.
La impulsora de la iniciativa argumenta que en el ámbito de la actividad física deportiva, recreativa o simplemente amateur no federada, es frecuente la ausencia de evaluación médica previa a la realización de la competencia, por lo que se han tenido que lamentar accidentes cardiovasculares e incluso muerte súbita.
Entre otros objetivos, en el proyecto Diéguez prevé poner en consideración las condiciones particulares de salud de los participantes que intervengan en estas actividades, a los efectos de disminuir los riesgos que puedan afectar su salud psicofísica, en forma previa al desarrollo de las competencias.
Además, plantea que se deben identificar patologías preexistentes a la participación en estas actividades, particularmente en los aspectos cardiológicos, respiratorios, vasculares y motrices, que puedan exponer al competidor a riesgos de lesiones, enfermedades y colapsos.
Asimismo, propone que se evalúe el nivel de condición física para el deporte de que se trate y que se concientice a las personas que participan, así como a sus padres, en el caso de deportistas menores, acerca de los beneficios y cuidados que deben observarse en la práctica de deportes, participación en maratones y en cualquier otra clase de competencia, y toda otra cuestión relacionada con la salud de los participantes.
Según el proyecto, sería exigible por parte de los organizadores, en forma previa a la competencia deportiva, un Certificado Médico de Aptitud Física suscripto por un profesional médico matriculado en las especialidades deportología, cardiología y/o clínica médica, en el que se certifique que el participante se encuentra en condiciones físicas aptas para el desarrollo de la actividad física, que tendrá una validez de 180 días, que quedará en posesión de la organización conjuntamente con la planilla o ficha de inscripción.
Deberían cumplir con estas premisas aquellas instituciones, asociaciones públicas o privadas, personas físicas o jurídicas, juntas vecinales, asociaciones profesionales, sindicales u otras y escuelas deportivas que, como actividades complementarias a sus fines principales, que organicen campeonatos, competencias y maratones que impliquen el desarrollo de actividades físicas o deportivas. Idéntica exigencia deberá cumplirse en las competencias organizadas por el Estado Provincial y Municipal, cuando revista carácter de organizador.
Para la extensión del Certificado Médico de Aptitud Física, el profesional actuante debería evaluar los antecedentes personales del solicitante referido a patologías coronarias, cardiovasculares, respiratorias, neurológicas, articulares, musculares, lesiones previas, alergias, entre otras que a su criterio debe incluir.
Por otra parte, los organizadores de competencias deberían contar con la asesoría de un profesional médico matriculado, quien fiscalizará la presentación de los certificados médicos de aptitud física y verificará el cumplimiento de los requisitos exigidos, con una anticipación no menor a las 24 horas del inicio de la competencia.
La iniciativa también propone que los organizadores de las competencias deberán garantizar la permanencia de un servicio de emergencias médicas en el lugar de la competencia y durante todo su desarrollo.