El legislador Jorge Ocampos (CC-ARI) propone declarar la emergencia económica en el sector vitivinícola de la provincia de Río Negro y que el Poder Ejecutivo arbitre los medios para atender las demandas derivadas de la situación de crisis del sector.
El legislador plantea en el proyeto de ley que los productores y la industria “atraviesan actualmente una gravísima situación, manifestando un sentimiento de abandono, pues expresan que tanto las autoridades nacionales como provinciales no han dado respuestas a sus problemáticas”.
Según explica en los fundamentos de la iniciativa, actualmente la producción cuenta solamente con 1.700 hectáreas en continua merma y algo más de 20 bodegas. “La falta de renta se fue agravando en el tiempo debido al aumento de los costos internos de producción, la inflación, la caída en las exportaciones de vinos, etcétera, probablemente una de las peores crisis que este sector ha atravesado en los últimos tiempos, y el productor es el más perjudicado. El vino tiene un techo en el mercado local, porque si sube pierde consumidores”, señaló.
Describe que en la última década, el consumo per cápita cayó 25%, hasta 24,3 litros anuales, recibiendo el productor valores que no le permiten renta. Se habla de pérdidas de hasta 25% debajo de los costos operativos. La mano de obra es el principal componente, estimando un impacto del 40% sobre los costos.
Ocampos remarca en los fundamentos del proyecto que “los productores continúan esperando el auxilio de un Estado ausente, nadie se comunicó, nadie gestionó, y la uva sigue en las plantas. Un panorama más que angustioso es que trabajen todo el año para no levantar la cosecha”.
Según el parlamentario, “esta iniciativa es presentada en razón de la crisis que atraviesan los vitivinicultores rionegrinos, los que me acercaron y expusieron sus inquietudes, por lo tanto, considero necesario se declare la emergencia en dicho sector”.